La artista holandesa ha detectado que Madrid es una de las ciudades más verdes de Europa y eso significa que tiene una gran variedad de pájaros autóctonos como el Águila Imperial o Buitre negro Euroasiático.
La exposición arranca en el exterior del edificio, concretamente en la fachada y los toldos, continúa atravesando el edificio mediante un recorrido lineal señalado por una banda impresa y finaliza en la terraza de La Casa Encendida, revelando un último trabajo sorprendente.
Los trabajos de la artista exploran la conexión entre el espacio exterior y el interior. Pretenden manipular las experiencias preconcebidas que tenemos cuando entramos en un espacio a través de la creación de nuevas experiencias basadas en los cambios de luz, color, sonido o materiales nuevos. Este es el punto de partida de la muestra, desvelar o recordar a los habitantes y visitantes de Madrid el hecho de que dicha ciudad está dotada de muchas zonas verdes y de una fauna autóctona muy rica.
Petra Blaisse comenzó su carrera artística en el departamento de Artes Plásticas del Stedelijk Museum de Ámsterdam. A partir de 1987 comenzó a trabajar como diseñadora freelance y fue cobrando reconocimiento por sus propuestas arquitectónicas. Paulatinamente ha ido centrando sus trabajos en el uso de originales materiales textiles, sobretodo aplicándolos en espacios interiores y para el diseño de jardines y paisajes.
Petra Blaisse trabaja en los límites entre arquitectura interior y paisajismo, en un repertorio tan inusual como inesperado, donde sus elegantes interiores y sus jardines revelan auténticas e ingeniosas soluciones arquitectónicas. Su trabajo investiga en nuevos y ambiciosos roles para la arquitectura interior y el paisaje.
Trabaja en un universo de textiles, membranas, filtros, movimiento, luces y sombras mediante la interacción y transformación de elementos y sus infinitas combinaciones. Sus trabajos exploran la tercera dimensión, concibiendo auténticas estructuras, sofisticadas y emocionantes.
Ciudad: Madrid
Agentes: Petra Blaisse