Se espera un aluvión de visitantes para participar las jornadas de puertas abiertas, que van a celebrarse este fin de semana (los días 21 y 22 de agosto) y para las que no es necesario formalizar reserva previa. Según declaraciones de Pedro Zuaza (responsable de comunicación) recogidas en lne.es "En vista de la respuesta que ha habido para las visitas guiadas es lógico pensar que van a ser muchas las personas que se acerquen a conocernos durante las jornadas de puertas abiertas. Sólo a través del perfil del Centro Niemeyer en Facebook, más de 500 personas han confirmado su asistencia".
Las visitas se realizarán por grupos, desde las once de la mañana hasta las ocho de la tarde en intervalos de media hora. Por el momento los responsables del Niemeyer no han adelantado si se van a abrir nuevos turnos de visitas guiadas a causa de la demanda, aunque tampoco lo descartan. "Estas jornadas están pensadas para corresponder a los avilesinos y a los asturianos que con su apoyo nos están ayudando a la hora de poner en marcha un centro cultural de estas características, son un regalo para ellos", señaló Zuazua días después de que se abriese el plazo de inscripción.
La nómina de voluntarios para desempeñar labores de guía de forma altruista durante las visitas que van a tener lugar durante la última semana de agosto crece día a día. Los responsables del Centro Niemeyer tienen registradas casi doscientas solicitudes de personas ligadas a sectores relacionados con el turismo, la arquitectura o las bellas artes de todas las partes de Asturias.
Las obras del complejo cultural de la ría, el Centro Niemeyer, afrontan su recta final y permiten contemplar ya en su práctica totalidad las curvas diseñadas por el arquitecto brasileño. El centro llamado a transformar la ciudad abre mañana por primera vez sus puertas para que avilesinos y visitantes puedan conocer las tripas, ya casi cerradas, de un cuerpo arquitectónico que lleva el sello de uno de los genios de la arquitectura contemporánea. Aquellos que participen bien en las visitas guiadas, bien en las jornadas de puertas abiertas que se desarrollan hasta el próximo día 29, podrán adentrarse en todos los elementos que conforman el conjunto arquitectónico salvo en uno, la torre mirador.
La entrada al centro se situará en el acceso por el puente de San Sebastián y una moqueta roja marcará el camino de los visitantes, que se encontrarán de lleno con la gran plaza abierta al mundo, de dimensiones similares a las de un campo de fútbol. La visita incluye el paso por el «foyer» del auditorio, que acogerá las exposiciones de menor envergadura. Bajo él se encuentra un parking con capacidad para 297 vehículos, con salidas bajo el mirador y el propio auditorio.
La visita proseguirá por el edificio administrativo, cuyos muros longitudinales de cristal reflejan como un espejo el conjunto arquitectónico y ofrecen vistas privilegiadas a los muelles comerciales. Este es, junto con la cúpula que albergará el museo, la pieza más avanzada en cuanto a construcción. Los operarios (en total trabajan en la margen derecha unas 170 personas al día) ultiman ya el edificio, que dará cabida al «Film Center» de Woody Allen, salas de reuniones y conferencias, un punto de encuentro donde se podrán adquirir entradas para los espectáculos y una cafetería. Las oficinas de la fundación que gestiona el centro permanecerán en la ubicación actual, en el teatro Palacio Valdés.