La Coruña se queda sin proyecto pionero.

En abril del 2007, el estudio catalán aq4 arquitectura (Ibón Bilbao, Caterina Figuerola, Carlos Gospi y Jordi Campos), se proclamaban ganadores del concurso de ideas para el Área Residencial Universitariade Elviña (en el Campus Universitario de A Coruña).

 

“Fenda 315”, es el lema de un edificio que plantea unir los campus de Elviña y Zapateira con 18.450m2. El proyecto constará de 400 viviendas protegidas para estudiantes y personal docente universitario. Serán pisos de entre 40 y 45m2, dos alturas+bajo y una cubierta vegetal transitable, para favorecer la integración de la edificación en el entorno y adaptarse a la topografía, que además estarán rodeadas por vías peatonales. La superficie total de la ocupación llegará hasta los 45.000m2, de los cuales 1.000m2 se destinarán a espacios comunes, como locales sociales, salas multiusos, cafetería, supermercado y hasta un aparcamiento subterráneo.

 

Se trataba de un modelo pionero de la construcción sostenible con madera de Galicia (pino y eucalipto, aunque este último no es autóctono), para promover el sector forestal. Los arquitectos habían diseñado un modelo integral para la construcción de casas con frente e interiores de madera. El Centro de Innovación y Servicios de la Madera y el grupo gallego productores participaron en este proyecto de innovación. 

 

Durante la investigación, se encontraron numerosas ventajas en el uso de la madera: ligereza, sostenibilidad, calidad e incluso una función de carácter reivindicativo y dignificante. El proceso es circular: el edificio se aprovecha de una materia prima abundante en los bosques de Galicia, sin la necesidad de importar materiales, al tiempo que genera un aprovechamiento forestal que hace del monte un espacio rentable y valioso. Una producción no contaminante. Se trata de hacer primero la estructura de hormigón en una nave industrial, y después, desde dentro, ir levantando las diferentes alturas, paredes, suelos y techos, todo ello de madera.  

 

 

Pero, de momento, La Coruña, seguirá siendo la única universidad gallega sin residencia pública, ya que actualmente el proyecto está parado por motivos económicos.

 

Ahora el estudio se plantea renunciar a este tipo de construcción para poder llegar a un acuerdo con la Xunta y conseguir materializar el proyecto: "La verdad es que el sistema constructivo de madera nativa fue lo que hizo que este proyecto fuese particular, pero si la situación actual no se puede hacer así, los planos se pueden adaptar a las nuevas necesidades", cree Ibon Bilbao. "El diseño es lo suficientemente flexible como para adaptarse a la nueva situación económica" porque "era una propuesta muy ambiciosa." Concreta que podrían reducir las fases, la eliminación de las áreas comerciales y renunciar a cualquier pretensión de que el edificio fue construido con madera de Galicia ", una característica que constituye" el alma "de la infraestructura diseñada para los estudiantes Coruña.