La ciudad Y la arquitectura de Zaragoza, vista por algunos integrantes de La ReGeneración de arquitectos zaragozanos. Queda claro: antes de ir a la Expo del Agua hay que recorrer el Ebro en los dos sentidos, ir y volver por las dos orillas. Hay que entrar en Zaragoza por el oeste y llegar hasta el centro de la ciudad hasta la Plaza Paraíso. Hay que recorrer el Canal Imperial de Aragón desde el barrio de Casablanca hasta Torrero, entrar por el paseo de la Independencia, ir por la calle Alfonso y sentarse en la Plaza del Pilar a tomarse un helado. Tocar el agua en la pasarela de Manterola que ha acercado el río a los zaragozanos, visitar la Seo y vivir el arte mozarabe del Palacio de la Aljafería y su convivencia con lo contemporáneo de Franco y Peman. Entre muchas otras cosas y arquitecturas imprescindibles como el legado de los Borobio y Yarza, los juzgados de Sota, la biblioteca de Cotelo y Puente, las elegantes propuestas de Tobías, o «mismamente» las obras participadas por quienes aquí conversan como guarderías, milla digital y naves para Imaginariun, vivienda social o estaciones intermodales como Delicias. Gente educada que administra lo que cuenta… y lo que no cuenta, que no de todo se puede o interesa hablar.
Arquitecto/s Autor/es: Julio Clúa