[Zetas]. Pocos días atrás se ha tomado la decisión de llevar a cabo la fase final en la rehabilitación y futura puesta en marcha del Parador de Veruela situado en las faldas del Moncayo -techumbre topográfica del Sistema Ibérico-.
Se trata de un conjunto amurallado, cuyo origen data del s. XII y que atiende a un estilo cisterciense. Con el paso del tiempo han tenido lugar sucesivas ampliaciones y rehabilitaciones, las cuales llegan hasta nuestros días.
El objetivo es reactivar una economía a través del turismo en la zona, dotando al conjunto de una variada oferta cultural propia, con la recuperación de un espacio expositivo dedicado al ínclito poeta G. A. Bécquer y contando con el actual Museo del Vino de la D. O. Campo de Borja. Factores que sumados al propio interés arquitectónico del monasterio esperan la conclusión de unas obras que darán como resultado 30.000 m2 destinados al propio uso del Parador, ubicado en la zona oriental del conjunto y que ocupa el Palacio abacial de origen barroco.
En definitiva, se trata de recobrar la memoria de este conjunto monástico entendido como un bello lugar de parada y ya no solo de paso que con la futura consecución de las obras de rehabilitación volverá a verse dotado de su significado habitable y por lo tanto vital.