05AM Arquitectura gana el concurso para el nuevo centro cultural de Roses

El edificio, que se espera que esté completado en 2012, está ubicado en la Riera dels Ginjolers de Roses, localidad del Alt Empordà. Esta riera está urbanizada a base de viviendas plurifamiliares y hoteles de pb+4, y limita un barrio formado por un tejido de casas de crujía estrecha con un máximo de pb+3. Las bases de concurso establecían que el nuevo centro cultural debía resolver la transición entre estos dos mundos.
El centro cultural es un edificio con dos programas, formado por un centro cívico con cafetería, salas para niños, talleres y su administración, y la sede del SUF (Socediad de Unión Fraternal de Roses). El programa era muy justo para el solar dado, que, además, debía afrontar unos condicionantes urbanísticos muy potentes.
La respuesta del edificio es doble: urbanísticamente se divide en dos alas. La primera recoge las cuatro plantas de la Riera dels Ginjolers y la segunda tiene tres, para atarse con el tejido del barrio. El ala de tres plantas se mete decididamente, en voladizo, dentro de la Riera dels Ginjolers y actúa como reclamo reclamo para un edificio público. La segunda se alinea con las fachadas existentes. Entre ellas se forma un patio a partir de la planta primera, creando un sistema de terrazas escalonadas que servirán a diversos espacios interiores. Las fachadas del edificio juegan a perder la escala de lo que las rodea de modos opuestos: la que se ata con el barrio se forra con una celosía que parte en tres el módulo de un piso y reduce la escala del edificio, sobre un zócalo envidriado. Las otras se resuelven con grandes vidrieras de módulo superior a un piso. Los testeros de las alas (es decir, la fachada principal) se dejan ciegos.
La segunda respuesta tiene que ver con el programa: éste se resuelve con la polivalencia de los espacios (la sala del SUF es, prácticamente, una prolongación del hall y está fuertemente vinculada a la cafetería y, a través de ella, al vestíbulo y la sala de exposiciones del Centro Cívico, las aulas y el resto de dependencias sirven, todas ellas, para más de una cosa) y con un sistema de espacios servidos que sustituye los almacenes por armarios colocados estratégicamente en los pasillos de accesos a las diversas salas principales. Las terrazas sirven, igualmente, para diversos usos según el ala desde donde se acceda: así, la que está en la planta segunda sirve, principalmente, como sala infantil al aire libre, pero también puede ser usada como prolongación de las aulas e incluso como sala de actos adicional al aire libre. En la planta tercera se colocan los talleres que más iluminación requieren.
La disposición y la volumetría del edificio permiten, asimismo, la ventilación e iluminación natural de todo el programa en un solar muy justo.

Se ha pasado el cuestionario Scalae a los arquitectos:

Principios: ¿Qué pensáis que ha determinado que el jurado se haya decantado por vuestra propuesta?
En el contexto de una esquina urbana con dificultades de iluminación natural y con una de sus fachadas a un paseo peatonal, nuestra propuesta hace una apuesta por la realización de un patio abierto al paseo que soluciona la iluminación natural de los espacios interiores y que además se convierte en el elemento representativo i comunicativo de la actividad interior. Este patio también permite identificar dos volúmenes que resuelven la adaptación al entorno urbano. En el interior mediante la posición estratégica del núcleo de comunicaciones verticales permite zonificar y dar flexibilidad al programa.
Pensamos que la solución con un único elemento claro y sencillo que resuelve múltiples aspectos es el factor más determinante del éxito de la propuesta.

Proceso: ¿Qué condiciones consideráis favorables para que vuestro proyecto se desarrolle de acuerdo a lo previsto?
Pensamos que la propuesta es clara en su definición estructural y funcional, hecho que nos da confianza en el desarrollo del proyecto. 

Resultado: ¿Cuál pensáis que son las principales capacidades transformadoras de la propuesta?
La principal capacidad transformadora del proyecto es su vocación a mostrar su actividad interior que, tratándose de un equipamiento cultural para la ciudadanía, facilita la comunicación de sus actividades e invita a su utilización.