Juan Herreros, ganador del Premio AD al Arquitecto del Año 2010

La revista AD entregó sus premios de Arquitectura, Diseño e Interiorismo en el Casino de Madrid. Estos premios se conceden anualmente a profesionales de los tres ámbitos y cumple ya su cuarta edición. La revista AD Architectural Digest es una cabecera de carácter internacional editada en España por el grupo Condé Nast.

El jurado del premio está formado por: Jordi Labanda, ilustrador; Juan Gatti, Director de Arte; Cristina Jiménez, periodista; Ricardo Labougle, fotógrafo; Oliva Arauna, galerista; Angel Schlesser, diseñador; Pablo del Val, asesor artístico; Pascua Ortega, decorador; Lourdes Fernández, directora de Arco; Anatxu Zabalbeascoa, periodista; Kike Sarasola, empresario; Patricia Espinosa de los Monteros, periodista; Antón García-Abril, arquitecto; Tomás Alía, interiorista; Luis Moreno Mansilla y Emilio Tuñón, arquitectos.

Premio AD al Arquitecto del Año 2010: Juan Herreros. Le hace entrega del Premio Montse Cuesta, directora de AD.

Este premio, que ha recaído en arquitectos como Zaha Hadid o Mansilla y Tuñón, lo recibe Juan Herreros por su larga trayectoria profesional, docente y de investigación pero muy especialmente como reconocimiento a la calidad y repercusión internacional de sus últimos proyectos. En su tercer año de actividad después de la disolución del estudio, Abalos&Herreros, Juan Herreros Arquitectos propone una media fusión entre arquitectura de autor y pragmatismo responsable.

Esa es la razón por la que en su lista de clientes actuales encontramos instituciones como el Museo Reina Sofía, compañías como Hispasat o Bergé, organismos como el Instituto del Suelo de Cataluña o el Ayuntamiento de Madrid para quien desarrolla en equipo el Proyecto Estratégico para el Centro. Una peculiaridad del estudio es la profusión de colaboraciones con artistas como Mónica Fuster o Muntadas, universidades como Columbia, organismos como el Observatorio de la Sostenibilidad de Murcia y un sinfín de consultores, ingenierías, expertos de todo tipo, dirigido por la convicción de que la arquitectura es hoy fundamentalmente un trabajo en equipo en el que el cliente desempeña un papel fundamental.