17 de noviembre de 2008

El próximo viernes 30 de Noviembre de 2007 se inaugurará el nuevo Museo de Lleida proyectado por el arquitecto Joan Rodón quien ha pensado este edificio como un nuevo punto de referencia de la ciudad, que pueda ser ‘muy vivo y visitado’

Según informa la Agencia EFE, Joan Rodon Arquitectes, con sede en Barcelona, fue el despacho ganador del concurso de ideas para proyectar y construir este nuevo museo, ubicado entre el casco antiguo y el ensanche de la Rambla de Aragó, que ha promovido un consorcio público integrado por la Generalitat, el Ayuntamiento, la Diputación, el Obispado y el Consell Comarcal del Segria.

Tras seis años de trabajos, a cargo de un equipo multidisciplinar de 60 personas, que incluye a doce arquitectos de la firma, arqueólogos, historiadores, museógrafos, iluminadores y constructores, todo está a punto para que el día 30 el inmueble abra sus puertas al público y muestre sus 8.500 metros cuadrados de superficie y las 800 piezas de sus diferentes exposiciones.

Rodon ha explicado que ha apostado por una construcción que se convierta más en una referencia que en un icono de la capital ilerdense, integrado plenamente en el tejido de la ciudad. ‘Lo que más temería es que la gente no lo visitara ahora’, apostilla.

Acostumbrado a participar en proyectos complejos como la remodelación del edificio de la Generalitat de la plaza Sant Jaume o la Casa de les Punxes, el arquitecto ha trabajado ahora en un lugar que habían ocupado los árabes, luego fue convento, hospital militar y orfanato.

El derribo de la antigua Llar de Sant Josep dejó un vacío sin vida urbana, que ahora con este edificio se quiere paliar, convirtiéndolo en una especie de ‘cosido’ de los tejidos de la ciudad vieja y el ensanche de Lleida.

El edificio no es muy alto y se ha planteado en varios volúmenes, en los que se ubican las diferentes áreas del Museo: la de atención pública, trabajo interno, exposición permanente y exposiciones temporales.

La fachada será de piedra calcárea beige con el objetivo de atenuar el fuerte sol de la ciudad en verano y disminuir las sombras producidas por la niebla en época de frío.

Tiene escasas aperturas, pero ilumina con luz natural los espacios que lo necesitan a partir de balcones interiores situados tras una celosía de piedra natural.

Ref.

Joan Rodon Arquitectes: [www.rodonarquitecte.es]

Fuente: Centro de Enlace AE BCN

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