Autor: scalae

17 de noviembre de 2008 El martes 6 de Marzo se ha entregado, en Bilbao, el premio ‘Ciudad, Urbanismo y Ecología’ concedido por la Agrupación Vasco-Navarra de Arquitectos Urbanistas a los autores del proyecto de la Ciudad del Medio Ambiente en Garay y Soria, los arquitectos Patxi Mangado y Félix Arranz, navarro y riojano respectivamente.Tal y como informa ‘agroinformacion.com’, el secretario general de la consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, José Manuel Jiménez Blázquez, y Domingo Heras, representante de la diputación de Soria en el Consorcio para la Ciudad del Medio Ambiente recogieron ayer el premio «Ciudad, Urbanismo y Ecología 2006» que el Colegio Oficial de Arquitectos Vasco-Navarro, a través de la Agrupación Vasco-Navarra de Arquitectos Urbanistas, ha otorgado al proyecto de la Ciudad del Medio Ambiente de Soria. Los arquitectos de la Ciudad del Medio Ambiente, Patxi Mangado y Feliz Arranz, han recogido también este galardón, que reconoce a los arquitectos y promotores de proyectos de planificación urbanística o mejora urbana que destacan por su originalidad, importancia profesional o ciudadana, o por su especial valor social y cultural. El acto de entrega del premio ha tenido lugar en la sede de la Fundación del BBVA en Bilbao. Los encargados de entregar los galardones han sido Alfonso García Borreguero, presidente de la Agrupación Vasco-Navarra de Arquitectos Urbanistas (AVNAU) y María Victoria Morras, Decana del...

17 de noviembre de 2008 El arquitecto catalán Carlos Ferrater calificó de ‘inmenso error’ la tendencia de construir ciudades a base de grandes edificios ‘símbolo’ del poder político y económico, en detrimento del espacio público’A la larga eso serán cadáveres que no servirán de nada, de vidrio, inhabitables’, dijo ante la prensa el profesional, presente en la capital mexicana en un congreso internacional de arquitectura.Ferrater afirmó que el poder político y económico sólo quiere ‘símbolos a corto plazo’ y que las ciudades no se construyen así, sino ‘a lo largo de los años y los siglos’.El arquitecto criticó la arquitectura ‘de franquicia’, que ‘podría estar en cualquier lugar del mundo’, de ‘edificios un poco impersonales’, y en su lugar apostó por hacer la ciudad de forma más enraizada a la tradición y cultura de cada urbe.Respecto a las metrópolis españolas, afirmó que Barcelona ‘ya ha encontrado su lugar, ahora es cuestión de matizar’, mientras que Madrid ‘será una de las mayores metrópolis de Europa, porque tiene potencia y la ambición de serlo’.Sin embargo, aclaró que el modelo de la capital española no es el que él elegiría y se mostró partidario de urbes de menor extensión, más humanas, más dotadas de espacio público, así como de la recuperación de cascos antiguos.El arquitecto destacó también la transformación detallista que vive Sevilla ahora, más que la vivida durante la Expo 92,...