[Jaume Prat]
“Pura estructura”. Así definió Carme Pinós sus muebles en el curso de la rueda de prensa celebrada en su tienda.
Esta colección de muebles nace como la respuesta a una serie de problemas prácticos planteados a Pinós por parte de sus amigos, a los que ella respondía mediante diseños específicos que, poco a poco, se han ido seriando, racionalizando y redefiniendo. Su comercialización no es más que una extensión natural de este planteamiento.
Los criterios seguidos para la creación de la marca son totalmente sostenibles, muy adecuados para lo que está sucediendo. Los industriales son locales. Su fabricación es 100% catalana. El módulo de los muebles permite su empaquetamiento y distribución por mensajería convencional. Su montaje es fácil y rápido. No hay elementos accesorios: todos los componentes son resistentes. No hay intermediarios y se han reducido los márgenes de beneficio, de modo que el precio es muy competitivo, teniendo en cuenta la gama de los muebles.
Los acabados son, sencillamente, extraordinarios: Chapas de acero dobladas y troqueladas tantas veces como es necesario, que forman pisos, colgadores de ropa, estantes, estructura, cualquier cosa. Chapas de madera creadas específicamente para las mesas en grosores distintos para que funcionen, simultáneamente, de soporte y estructura. Pies de acero triangulares autoestables. El efecto supera, en mucho, al de las fotos: los muebles son de una belleza extraordinaria, producto del control, la precisión y el equilibrio entre solidez y ligereza. Por todo ello se conciben como una extensión natural de su arquitectura, en continuidad con el resto de sus obras.
Ciudad: Barcelona
Agentes: Carme Pinós
Edificios: Objects
Autoría de la imagen: Estudio Carme Pinós