En mayo de este bélico 2022 que nos ocupa, intimida, enfurece y entristece se han cumplido 20 años de algo especial. Algo bonito. Alicia celebraba sus cinco años de edad y en la excelente costumbre de regalar libros en los aniversarios alguien le obsequió con la versión española del "Very Mixed-up Animals", ilustrado por Ian Jackson (Wildlife Art Agency*). Le encantaba a la niña Alicia jugar a combinar animales. Celebraba con carcajadas cada nuevo espécimen, repetía el bizarro nombre resultante y te miraba, retadora, con su rictus de pilla y sus ojazos de futura pediatra, buscando el eco de tu risa cómplice. Algún tiempo después, en otoño, el libro vino que ni pintado en unos días en los que andaba dándole vueltas –tal y como se comenta en el artículo "Carafante, jilello o ebafa..."– a la posibilidad de lanzar una encuesta, investigación o... ¿publicación? en la que seccionar la experiencia de personas autoras de arquitectura en sus principios (cabeza), procesos (digestión) y resultados (output). Las bromas y no tan bromas con Alicia y también con Juan Herreros, –otro pillo maestro donde los haya, que animaba justo en esos días con lo de "venga, escribe la tesis"– cuando dedicamos una sobremesa a "investigar" poniendo nombre de arquitectos, arquetipos decíamos, a los variopintos animales que producen las combinaciones de las tres partes del libro-juego, tuvieron años después consecuencias que no podía sospechar entonces: pliegos, podcasts, ebooks, series, colecciones, estrategias docentes, relatos profesionales e incluso un acuario. En suma: un universo potencial de activismo editorial en arquitectura por venir.
El caso es que, a partir de esas no bromas, animales fabulosos y momentos especiales, es cuando se inicia la preparación de lo que poco después, ya entrados en 2003, sería el primero de los pliegos donde Rafael Moneo aceptó el reto de someterse a un intento de "deconstrucción" arquetípica. Fue intenso, laborioso para ambos. ¡10 revisiones! Fue bonito.
La fortuna de convocar y poder contar con la inteligencia colectiva y la generosidad ajena desde el enunciado mismo del proyecto, –como testimonio de ese arrancar compartido sirva la reacción entusiasta de Oriol Bohigas en sus "Cartas para ir tirando"– se materializó en una avalancha telefónica y de citas, mas o menos gastronómicas, trufadas de consejos y advertencias que permitieron entender que el hecho, la gracia, en esta singladura iba a ser el poder usar canales alternativos para documentar en línea de un modo que permita que cada cual pueda comparar las diferencias y las experiencias profesionales y de oficio de quienes se expresan y disfrutan de manera obstinada en la factura y en el habitar de la arquitectura. Es decir: el podcast primero, los ebooks y las series en vídeo streaming después, como herramientas documentales en línea, complementarían y puede que para muchos superarían los pliegos, por incluir su misma estructura, por su fácil e inmediato acceso, por su gratuidad y por permitir en consecuencia una frecuencia mas intensa y un campo de personas actoras e interlocutoras amplio y diverso.
Y ahí seguimos: persistiendo, dudando de si el libro mató a la arquitectura pero afortunados en la apuesta por la vigencia del mp3 en los podcasts, que llegó para quedarse, y por haber esperado a que el jpg y el mp4 combinados con la potencia de los dispositivos móviles y de la red pueda ofrecer una dimensión digna en las páginas digitales de trazas, trazos, planos y fotografías de arquitectura. Hoy si; ya es aceptable.
Ahora, regresando al tiempo presente de 2022, nos plantamos en agosto, amigos y amigas, tiempo de calores en Europa, de todo tipo y condición. Tiempo en el que hemos abierto el archivo para gozar, sin prisas y en línea, de los materiales clave que informan el trayecto de nuestro peculiar activismo editorial. Materiales que, para al menos un par de generaciones, han podido quedar ocultos o inalcanzables.
En el actualizado recipiente de scalae.net podéis encontrar, para su (re)visita, las reflexiones –tan personales, vigentes, certeras y consistentes– del maestro de Tudela, en su versión legible en línea y también en la versión audible en línea completa, original. Tal cual. Ojalá puedan contribuir en un buen verano regalándoos espléndidos momentos, tan excelentes como lo fue en su día el privilegio, hecho público en papel y bytes, de la conversación con Rafael.
Otra cosa mas: por si no fuera suficiente, tenéis los críticos entremeses, sabrosos, ingeniosos y provocadores del entonces jovencísimo Josep Bohigas y del eterno, fuera de tiempo, sin edad, Pep Quetglas. Puede sorprender que todo eso cupiese en tan poco papel. Aún sorprende mas darse cuenta de su plena (o casi) actualidad.
Lo dicho: tened buen presente, espléndido verano, plácido agosto, por favor. Que sea bonito.
Félix Arranz
Arquitecto y editor de SCALAE
(*) en edición en español de planetainfantil, ediciones de bolsillo, s.a., 1999. Barcelona. ISBN 84-8314-312-7 (ISBN de la versión original 1-901-32305-6, 1998 Orpheus Books Ltd) |