[Ángel] Del lat. tardío angĕlus, y este del gr. ἄγγελος ángelos; propiamente 'mensajero'.
1 m. En diversas religiones monoteístas, espíritu celeste creado por Dios para su ministerio.
2 m. Gracia o encanto. Tiene mucho ángel.
3 m. Persona en quien se suponen las cualidades propias de los espíritus angélicos, es decir, bondad, belleza e inocencia.
4 m. Mil. palanqueta (‖ barra de hierro empleada como proyectil). 5 m. Rel. En la tradición católica, cada uno de los espíritus celestes que forman su noveno coro y, junto con los principados y los arcángeles, la tercera jerarquía, cuya misión es actuar como mensajeros divinos. U. m. en pl.
(...)
ángel patudo m. coloq. Persona que, según quien así la llama, está muy lejos de tener la inocencia o buenas cualidades que otros leatribuyen.
Diccionario de la Lengua Española, RAE
¿Agosto a gusto? Lo hemos intentado, pero la agresividad de nuestro tiempo lo pone difícil. Nos trae lo atroz: incendios forestales por doquier, furia de armas en Gaza, Ucrania, desolación de tantas Áfricas, de tantas Américas, de tantos sures y oriente, en el crepitar de lágrimas desesperadas, atrapadas por un sentido descabellado del progreso; injusto, agotador. ¡Basta ya!
Dolor y disgusto de vida que suma en nuestro rincón la pérdida de inquietos arquitectos activistas que nos han influido -nos han hecho mejores- como el andaluz José Pérez de Lama o el catalán Manel Gausa; ambos inconformistas con el estancamiento en un pasado confundido con el presente, un presente sin atisbo de ilusión por lo futuro. Ambos atentos a la reivindicación de miradas laboriosas por la materialización de potenciales inmediatos. Ambos arquitectos de letra y oficio que han ofrecido instrumentos, situaciones y estrategias que lanzan el tiempo presente en procesos de futuros potenciales. Que en esencia en eso consiste proyectar. ¿O no?
Vienen al caso estos disgustos en el recuerdo de aquel fetiche (1), precioso y aterrador “Angelus Novus” de Paul Klee que Walter Benjamin describió como “...un ángel que parece como si estuviese a punto de alejarse de algo que le tiene pasmado. Sus ojos están desmesuradamente abiertos, la boca abierta y extendidas las alas. Y este deberá ser el aspecto del ángel de la historia..."
Viene al caso igualmente el disgusto de aquellos ángeles que observaban la historia y el sufrimiento desde un cielo que fue Berlín (2) y que paulatinamente se extiende a la totalidad del orbe. Esto parece, eso se nos dice.
Viene al caso aludir a tanto disgusto, tanto dolor, tanto silencio atronador, en el deseo de poner en valor ese singular privilegio que atesoran quienes participan en el pensar, elaborar y materializar de la convivencia, en las versiones no destructivas, conciliadoras, de la arquitectura... o la música. Consuelo y placer de quienes construyen, componen para transformar el vacío, dar espacio al silencio, iluminar lo inhabitable, desterrar el odio, obviar la pereza, exiliar el egoísmo, abolir la destrucción, cercar el yomimío… en algo que merezca la pena ser vivido, sentido, recordado y dignamente heredado por las generaciones siguientes, en ese collage en el que memoria y futuro se funden para tener sentido, paz… y armonía.
Ójala veamos pronto que tantos ángeles patudos desplieguen sus alas para conceder con su definitiva ausencia el testimonio de la sensatez que reclaman sus inquietantes miradas para con esta humanidad desquiciada.
Ójala sean las racionales, a la par que sensibles y emocionantes, música y arquitectura quienes nos puedan liberar de perdones y penitencias de seráficos e iluminados para ofrecer rutas, sendas, trazas generosas, compartidas… humanas, definitivamente humanas, sin dioses que manden, ni falta que hace; mas allá del bien y el mal.
Sendas como las que nos han mostrado Manel y José, que ahí están. Ójala nos recuerden.
Félix Arranz Arquitecto y editor de SCALAE
PS. tenemos citas a la vista: Barcelona, 18 SEPT, Arquitectura Música Pamplona, 24-26 SEPT, encuentros fAyS Madrid, 27 SEPT, manifestación pro Pasarela al RETA
(1) Número 0 de la revista “Carrer de la Ciutat”, 1977, pp 18 (2) Wim Wenders – Der Himmel über Berlin (1987)
Ilustración: Angelus Novus, Paul Klee, 1920. Walter Benjamin compró la acuarela en 1921. La llevó consigo hasta su muerte, en 1940 en Portbou (Girona), huyendo de la persecución nazi y del peligro de deportación.
En el reconocimiento del Consejo Editorial 2025 de SCALAE que en las iniciativas y apoyo de sus participantes: CRICURSA, GEZE, COSENTINO, FIGUERAS, JANSEN, BANDALUX, LEDSC4 y ROCA induce, programa y soporta el activismo editorial de scalae, que incluye el ariete digital de las "cápsulas" semanales, los boletines mensuales, las sesiones profesionales trimestrales... y las bibliotecas del archivo documental scalae.net
Ilustración: legajos de lo pendiente.
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