17 de noviembre de 2008

El arquitecto catalán Carlos Ferrater presentó en el Museo de Bellas Artes de Bilbao una exposición de paneles y maquetas sobre la manera de trabajar de su estudio

«Parte de mis raíces son de esta tierra, de Gordejuela, y cuando era niño, mi madre y mi abuelo siempre me hablaban de una ciudad de la que salían fuegos y cosas así; hoy Bilbao es una urbe que representa la buena arquitectura en el mundo», comenta Carlos Ferrater en ‘elcorreodigital.com’.

En la muestra titulada ‘Sincronizar la arquitectura’, se podrá ver gran cantidad de información y la complejidad de sus exploraciones formales, junto con el reconocimiento y análisis de parentescos en el devenir de la arquitectura y el arte del siglo XX.

Ferrater cree haber dado con lo que llama el «código genético» del lugar o, lo que es lo mismo, «las líneas geométricas a seguir», de manera que volúmenes y formas deben encajar perfectamente al cabo del Ensanche bilbaíno. Luego, unas fachadas que recuerdan a celosías, con «un juego de claroscuros» resultado de combinar elementos traslúcidos y opacos formados por láminas de acero, aportarán lo que considera un «toque mediterráneo».

El arquitecto – que hoy trabaja en un rascacielos en el Lido de Venecia, París, Nueva Delhi- es devoto del movimiento moderno y el minismalismo; ha sabido adaptarse a las circunstancias, como varios de sus edificios y actuaciones del calibre del nuevo paseo marítimo de Benidorm, un proyecto a medio realizar que supondrá la reinvención del frente litoral de la ciudad levantina con formas que parecen reflejar el vaivén de las mareas.

No está, sin embargo, por superar sin más las líneas maestras de la funcionalidad y el buen gusto; «de hecho, la mayoría de nuestros edificios -habla del estudio que forma con Xavier Martí y sus hijos Lucía y Borja- tienen que ver con el movimiento moderno; siempre que podemos trabajamos con la geometría euclídea, sin intentar romper sus procesos».

Ante la admiración que causa la arquitectura de formas extrañas, recuerda que «muchos personajes, arquitectos, ingenieros y artistas, desde Gaudí a nuestros días, ya han trabajado el espacio mediante la manipulación de geometrías complejas; sucede que el mundo contemporáneo exige a veces, por su complejidad, que no lo puedas arreglar todo con ‘cajas’».

Admira el metro de Foster, pero también a profesionales más ‘informales’ e intuitivos como Zaha Hadid y Frank Gehry, «pero lo nuestro es utilizar la geometría para explorar las condiciones culturales y la herencia arquitectónica de un lugar, a fin de determinar lo que hay que hacer».

La muestra, comisariada por Luis Domínguez y Javier Cenicacelaya, está patrocinada por la constructora Promotora Vizcaína.

Ref.

Museo de Bellas Artes de Bilbao: [www.museobilbao.com]

Fuente: Centro de Enlace AE BCN

 Palabras clave