Relato veraniego sobre la materialización construida de una necesaria reflexión sobre el espacio público, llevada a cabo por un heterogéneo grupo de arquitectos, estudiantes y vecinos en el CASC, Villena, Alicante.
12 de agosto de 2013

[Zetas] A finales de la década de 1940, el neerlandés Aldo van Eyck comenzó a tejer una red de espacios públicos de ocio y esparcimiento en Amsterdam que serían conocidos como playgrounds. Este proceso culminaría -con un total de casi 700- en 1978 y desde entonces, ríos de tinta han corrido acerca de estos lugares como exitoso modelo a replicar en otras ciudades. No obstante, el caldo de cultivo de los playgrounds fue el devastador paisaje urbano dejado por los persistentes bombardeos alemanes sobre la ciudad del Amstel durante la Segunda Guerra Mundial, que prácticamente exterminaron cualquiera de los rasgos identarios de la ciudad, incluyendo sus espacios públicos.

Si nos trasladamos a España, y salvando las distancias, hoy en día muchas de nuestras ciudades adolecen de configuraciones cada vez más descompensadas que han llevado a un deterioro progresivo de la calidad y uso del espacio público. Recientemente sometidas a intensos y veloces procesos de especulación durante el periodo de burbuja inmobiliaria, los ciudadanos han visto acentuarse problemáticas ya existentes e incluso han asistido al florecimiento de otras desconocidas hasta la fecha. La localidad alicantina de Villena, no ha resultado ser una excepción en lo que a este fenómeno se refiere y con sus casi 35.000 habitantes, cuenta con un bello centro histórico ubicado a las faldas de un castillo de origen árabe que data del siglo XII y se sitúa sobre una abrupta peña de la que van emergiendo pequeñas edificaciones. Conocido como El Rabal, este barrio sufrió un proceso de "guetificación" que alcanzaría su punto álgido durante los años 2007 y 2008, cuando la brecha social existente se vio acentuada por la migración acontecida en años anteriores, abandonando así viviendas que acabarían dando soporte al comercio y consumo de droga. Tal y como la administración amsterdamesa dispuso en su día recursos para hacer posible que la idea de van Eyck prosperase, el consistorio villenero activó en 2007 el Plan de Revitalización del Centro Histórico al calor del cual ha mejorado la situación durante el último lustro y se han llevado a cabo diversas iniciativas, sirviendo también de catalizador del reciente Certamen de Activación Socio Cultural (CASC). Promovido y organizado por el estudio valenciano El Fabricante de Espheras en colaboración con diversos agentes sociales de la propia Villena, la cita atrajo la semana pasada a la localidad a numerosos participantes con orígenes muy distintos. Durante diez días, se llevaron a cabo diversos talleres gestionados por distintos profesionales y colectivos* cuya finalidad no era otra que la activación y cualificación del espacio urbano. Profesionales pertenecientes a diversas disciplinas se dieron cita en la localidad alicantina para coordinar los distintos talleres, aunando fuerzas en uno de ellos los miembros de Zuloark y PKMN, junto con algunos colaboradores** y su correspondiente equipo*** de estudiantes. Dicha UTE -a la postre bautizada como #PAMICULO- trataría de plasmar en una misma intervención los conceptos de identidad, patrimonio y espacio público planteados por PKMN en sus experiencias MONUBENCH, unidas a la acuciante carencia de lugares destinados a dialogar sobre ciudad detectada por Zuloark y a la que tratan de dar salida mediante su iniciativa de Parlamentos Urbanos.

La materialización de ambos planteamientos es un artefacto de mobiliario urbano capaz de colonizar espacios públicos e incrementar su valor aportando un espacio de estancia, sombra, debate e incluso música. Ejecutado fundamentalmente en madera, cuenta con una serie de superficies destinadas al reposo cuya configuración y morfología son variables -atendiendo a unas sencillas reglas de juego comunes- coronadas por una cubierta compuesta de cerchas revestidas por una fina cubierta textil que permite tamizar la luz combatiendo la incidencia solar. Cuestiones constructivas al margen, la organización de las distintas personas intervinientes posee un valor intrínseco nada desdeñable. Tras varias jornadas de trabajo, fue posible engranar el funcionamiento de un grupo humano tremendamente heterogéneo donde incluso se especializaron tareas estableciendo una red de trabajo que funcionaba con efectividad creciente de manera exponencial según se sucedían las jornadas. Pese a encontrarnos ante una pieza asimilable a mobiliario urbano, la metafórica "customización" local materializada en la cubierta de cada uno de los módulos mediante una reproducción abstracta de algunas de las cuevas de Villena, contribuyó también a acentuar el sentimiento de pertenencia de estos elementos por parte de los vecinos de la zona. Así mismo, esta personalización no se encuentra reñida con una necesaria y valiosa sistematización de los elementos como unidades cuya configuración grupal, orientación o posición pueden verse modificadas en función de las necesidades del usuario. Al margen de lo ya expuesto, cabe preguntarse si el valor de una experiencia de este tipo reside también lo que no se advierte a simple vista: el proceso. La ejecución in situ,  permite un interacción directa y desde el primer momento con los que a la postre serán usuarios -y quizá custodios- de estos artefactos, lo que da lugar a un tipo de vínculo que si bien no garantiza una correcta pervivencia del mismo, incrementa sustancialmente las posibilidades de que esto suceda, convirtiéndose en imprescindible. Al igual que ocurrió con los playgrounds de van Eyck, el éxito de los mismos se encuentra ligado al sentimiento de pertenencia por parte de sus potenciales usuarios -en ese caso niños- durante los años que estuvieron en funcionamiento. Con un mayor o menor grado de planificación, los procesos y sistemas de gestión se antojan clave en iniciativas de este tipo.

El resultado de este workshop es una experiencia que habla de un tipo de espacio público con características diferentes y probablemente más valiosas de las que conocemos hasta la fecha. Un gran plan que se refiere a la ciudad sin imponerse a ella, a  la ciudad inminente, o al menos al tipo de urbe que debería emerger con fuerza en años venideros, habiéndose demostrado como caducos o ineficaces muchos de los modelos de utilización y gestión del espacio público existentes en la actualidad.

* ARAE, Paco Ortí, Espai MGR, Desayuno con Viandantes, cpesrm, Academia Villena, PKMN y Zuloark.

** Mikel Motosierra, Crisix, Jotero 1 y Jotero 2.

*** Albert B., Ibón D., Mar S., Cristina J., Javier H., Sandra M., Óscar H., Kamila D., Sonia A., Mari N., Pepe L., Cristina P., Marina V. y Pedro M.

Agentes: PKMN
Agentes: Zuloark
Ciudad: Villena (Alicante)
País: España
Edificios: Monubench
Edificios: Parlamento Urbano
Autoría de la imagen: Albert Burgers